Actúa sobre el cerebro, la tirosina es la sustancia que más influye en su funcionamiento y en el rendimiento intelectual. Los estudios clínicos han constatado que la L-tirosina ayuda a la concentración, aún en las condiciones más extremas, consiguiendo que el cuerpo se mantenga despierto y alerta.
El efecto positivo de la tirosina consiste en el aumento de los niveles de serotonina, lo cual tiene un impacto positivo sobre el organismo y el estado físico general produciendo el funcionamiento óptimo del sistema cardiovascular, sistema nervioso central. No en vano, la serotonina es conocida como la hormona de la felicidad. La tirosina es esencial para hacer los neurotransmisores cerebrales norepinefrina, epinefrina y dopamina. La tirosina utiliza la proteína de los alimentos que consumimos para producir neurotransmisores que afectan a nuestro estado de ánimo, el enfoque, la memoria y el estado de alerta. Su cerebro se basa en tirosina para la función cerebral y la producción de hormonas tiroideas. Los bajos niveles de tirosina pueden causar retraso mental debido a una tiroides poco activa.